Raúl de Tomás es sinónimo de gol, de victoria, de 'hat-trick', de estar enchufado y de aprovechar calidad y oportunismo por partes iguales. Raúl de Tomás es sinónimo de éxito para un Rayo Vallecano que se aferró con todas sus fuerzas al estado de forma del mejor jugador de la liga en el pasado mes de febrero y que tiene pinta de querer ser también el mejor de marzo y de abril... y que sigan cayendo meses para un Rayo que, a falta de lo que haga mañana el Huesca, dormirá como líder de Segunda División.

El conjunto vallecano se enfrentaba a un Reus que, pese a su situación en la tabla, planteó muchos más problemas de los esperados gracias a su planteamiento defensivo en la primera parte y a su cambio de rumbo en la segunda. Los catalanes juntaron sus líneas, cerraron filas entre el centro del campo y la frontal del área, apretaron cuando el Rayo avanzaba a zona de peligro e intentaron salir a la contra para inquietar a los franjirrojos. El dominio durante toda la primera mitad correspondía al conjunto de Míchel, que tenía mucho "respeto" a este partido. En los primeros cuarenta y cinco minutos, los vallecanos llevaron el peso del partido, generaron peligro y provocaron situaciones de gol. Embarba no estuvo tan enchufado como de costumbre, Comesaña estuvo a un nivel inferior al que suele mostrar y Trejo, desconocido Trejo, siguió en su línea de pasar mucho más desapercibido de lo que en Vallecas gustaría.

El que no pasa desapercibido es Raúl de Tomás. El ariete sería protagonista de principio a fin. Primero no acertando con las ocasiones que tuvo en la primera media hora y, después, metiendo para adentro casi todo lo que tocaba. El primer tanto llegaría en el minuto 32 y el segundo, un golazo de falta que no pudo detener Badía, al filo del descanso. Entre uno y otro, el Reus, en su primer y prácticamente único acercamiento a la portería vallecana también acertaba de cara a puerta para dejar un resultado parcial de 2-1 que hacía justicia al mayor dominio vallecano, aunque no a las ocasiones generadas (de haber acertado más, el marcador debería haber sido más amplio).

Tras el descanso, el Reus aportó algo más al fútbol del partido, le robó el balón al Rayo, marcó el ritmo del partido y, tras lograr el empate, estuvo más cerca de lograr la victoria que de perder. Aun así, los catalanes parecían cómodos con el punto sumado y ralentizaron el partido, intentaron que pasaran los minutos sin sufrir y llevaron el duelo hasta un tramo final en el que sucedería lo que menos esperaban y deseaban.

El arreón final de los vallecanos llevó a un gol anulado por fuera de juego de Alex Moreno y a un último acercamiento en el que el 'iluminado' Raúl de Tomás conseguiría sacar petróleo para que el Rayo sume tres puntos y se sitúe líder provisional de la categoría antes del choque entre el Huesca y el Sporting de mañana (los asturianos serán el próximo rival de los franjirrojos). El Rayo aprovecha el gran estado de forma de Raúl de Tomás para seguir en lo más alto de la tabla.