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El Barcelona barre a un impotente Rayo Vallecano

Escrito por Sábado, 15 Febrero 2014

    El Rayo Vallecano no pudo hacer nada ante la aplastante superioridad de un F.C. Barcelona que no quiso dejar ningún lugar a la duda. Los de Martino marcaron pronto y terminaron goleando a su rival.


    F.C.BARCELONA6 - 0RAYO VALLECANO

    Ficha técnica:

    F.C. Barcelona (6):Valdés, Alves, Piqué, Puyol (Mascherano, minuto 67), Adriano, Sergio Busquets, Fábregas, Iniesta, Messi (Tello, minuto 73), Pedro (Neymar, minuto 61) y Alexis.

    Rayo Vallecano (0):Rubén, Arbilla (Tito, minuto ,41), Saúl, Zé Castro, Mojica, Baena, Trashorras, Bueno (Viera minuto 61), Falque, Rochina y Larrivey (Longo, minuto 72).

    Arbitro: Martínez Munuera.

    Goles: 1-0. Minuto 1. Adriano; 2-0. Minuto 35. Messi; 3-0. Minuto 52. Alexis; 4-0. Minuto 55. Pedro; 5-0. Minuto 67. Messi; 6-0. Minuto 88. Neymar.


    El Tata Martino aprendió la lección que el Rayo Vallecano le dio a su equipo y, dándole la vuelta a la tortilla, acribilló a ocasiones y goles a un equipo vallecano totalmente a merced desde el minuto uno hasta el noventa. La de hoy puede ser una crónica muy extensa, resumiendo la superioridad de los blaugrana, o muy reducida, aceptando y aplaudiendo la calidad, la capacidad de creación y la potencia de uno de los mejores equipos del mundo.

    El Barsa demostró hoy que la distancia que separa al primero y al penúltimo en la liga es mucho más aún que la gran cantidad de puntos que existen entre ellos. La posesión, algo tan 'manido' tanto en Barcelona como en Vallecas, toma sentido cuando uno sabe lo que debe o, al menos, lo que es capaz de hacer con el balón. Cuando el Barcelona tiene el balón, siempre o casi siempre, finaliza la jugada. Cuando la tiene el Rayo, la película pocas veces finaliza igual. Para colmo, cuando lo hace, es decir, cuando acaban rematando a portería contraria, el resultado tampoco se parece en nada. Hay muchas diferencias, con nombres y apellidos. Messi, aclamado por todo el estadio, es capaz de rematar, asistir, volver a rematar, superar a Rubén con un toque tan sutil como exquisito, volver a golear, correr, pasar, regatear... la esencia del fútbol 'casi-total' se concentra en un jugador que parece estar dotado para hacer lo que se le ocurra, ni más ni menos.

    Si al argentino la sumamos que Adriano convirtió en gol el primer balón que tocó, que Cesc se mueve entre líneas como nadie, que Pedro siempre golea, que Iniesta es el jefe de gran parte del ataque del Barcelona y que los demás cumplen a la perfección la labor asignada, lo único que queda es rendirse ante la evidencia.

    Y el Rayo tuvo que hacerlo, contra su voluntad, pero terminó rendido a los pies de un auténtico torbellino. Los franjirrojos tuvieron una buena ocasión en las botas de Alberto Bueno, que no pudo superar a Valdés en su salida, y varios disparos con intención de Rochina desde lejos en la segunda. Aparte de esos tres o cuatro destellos, su habitual monólogo de juego se transformó en carreras y más carreras persiguiendo sombras, en balones a la espalda que les obligaban a replegarse y en dificultades para crear una vez recuperado el control

    Así fueron transcurriendo los minutos de un partido en el que marcaron el mencionado Adriano, Messi -que hizo doblete-, Alexis, Pedro y el brasileño Neymar, recuperado para la causa y autor de un soberbio gol por la escuadra de la portería de Rubén que puso el colofón a un partido sin historia, por mucho que los vallecanos quieran extraer lecturas positivas. Por el momento, todo sigue negro, aunque no fuera esta la plaza más idónea conseguir un cambio de tendencia.

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