El Rayo Vallecano mejoró su imagen, optimizó sus opciones y, aunque no acertó de cara a portería, evidenciando la falta de gol que de momento es uno de sus hándicaps, logró imponerse futbolísticamente a un Cesena que aprovechó la mejor ocasión que tuvo y que complicó defensivamente las cosas a un Rayo que estuvo más aplicado que en semanas precedentes.

El 'varapalo' que dio Jémez a sus jugadores a la conclusión del último amistoso en Leganés parece que sirvió como revulsivo para que los franjirrojos afrontaran el partido ante el Cesena con otros bríos. La inclusión de Aquino y Jonathan Pereira fueron las únicas novedades a modo de debut de un once del que se cayeron Embarba, Quini, Aguirre y Licá y en el que entraron Tito y Nacho para completar un equipo que supo manejar el balón y que fue superior al rival durante todo el encuentro.

Moviendo el esférico con soltura llegaron las primeras ocasiones. Trashorras lo intentaba con un remate ajustado, mientras que Jonathan Pereira también se atrevía a probar fortuna, aunque sin demasiada suerte. El inicio de choque fue un monólogo del Rayo, que entró mejor y que se dispuso a imponer su idea sin dejar opciones al rival.

A la media hora, el Rayo ya había acumulado otras dos buenas oportunidades, una en las botas de Bueno y otra con un disparo de Kakuta que se marchó alto por poco. El conjunto de Jémez seguía 'achuchando' al rival y, tanto Aquino como Kakuta de nuevo, estuvieron cerca de adelantar a los vallecanos en el marcador. El Rayo era dueño del partido y la portería de Cobeño apenas se vio incordiada por un Cesena que se sintió inferior desde los primeros compases.

Primer acercamiento, gol y a remar contra corriente

La segunda mitad arrancó con sorpresa negativa para el cuadro franjirrojo. En el primer y único acercamiento de los italianos hasta el momento (minuto 51), Marilungo enganchaba un buen balón que sorprendía a Cobeño para situar el 1-0 en el marcador. El Rayo, incomprensiblemente, después de la gran cantidad de ocasiones generadas, se veía por debajo en el marcador.

Este contratiempo no provocó variaciones en el juego de los madrileños, que siguieron buscando su gol. Kakuta y Baena volvieron a probar fortuna pero tampoco estuvieron acertados, mientras Jémez movía por primera vez el banquillo a falta de media hora para la conclusión. Manucho, Lass y Pozuelo tomaban el relevo de Nacho, Pereira y Aquino, buscando nuevos aires en ataque. El balón seguía siendo del Rayo, mientras el Cesena aprovechaba su ventaja para cerrar líneas e imposibilitar las acciones de los vallecanos. Licá, que había entrado en sustitución de Kakuta también gozó de su oportunidad, pero sería Bueno, tras una gran acción individual de Lass, el que lograría el empate a falta de un cuarto de hora.

El tramo final del partido siguió siendo del Rayo y Pozuelo estaría cerca de lograr el segundo a pase de Jozabed, que había entrado en lugar del goleador, Bueno.

Al final el Rayo no consiguió el objetivo de la victoria, pero regresa a Madrid con las buenas sensaciones dejadas por todo el equipo en un partido en el que fue superior a un Cesena que aprovechó una ocasión para lograr un empate que bien pudo haber finalizado con goleada visitante.

Rayo Vallecano: Cobeño, Tito, Zé Castro, Abdoulaye, Nacho, Baena, Trashorras, Jonathan Pereira, Bueno, Kakuta y Aquino.

También jugaron: Manucho, Lass, Pozuelo, Jozabed y Licá.