Si 'la cara es el espejo del alma', la de Zé Castro no deja vislumbrar las buenas sensaciones que a los aficionados del Rayo Vallecano les gustaría percibir. El central portugués del conjunto franjirrojo continúa con su trabajo al margen del grupo y sigue adelante con su recuperación tras haberse perdido el último compromiso liguero de su equipo ante el F.C. Barcelona, pero su 'feeling' no termina de ser el mejor.
Hoy, durante el entrenamiento vespertino del equipo en el Estadio de Vallecas, se le vio ejercitarse en solitario, ante la siempre atenta mirada del preparador físico Víctor Paredes, que continúa con la planificación diseñada para la recuperación del central.