Tal cual. La afición del Rayo "pidió" penalti en una jugada de Rodrygo, jugador del Real Madrid, en la que cayó dentro del área cuando se disponía a encarar a Dimitrievski en el primer tiempo del Real Madrid 2-1 Rayo Vallecano. Con Lejeune a varios metros de distancia y sin oposición alguna, el delantero blanco tropezó solo y perdió el equilibrio, desbaratando una gran ocasión de gol.
A partir de ahí, lo que sucedió fue otra de esas historias que definen claramente a la afición del Rayo. Con una ironía fuera de cualquier lógica, la grada ocupada por el medio millar de seguidores franjirrojos comenzó a cantar "Penalti, penalti, penalti", seguido de un no menos espectacular "Corrupción en la Federación", cánticos históricos escuchados durante décadas en los campos de fútbol y que, con toda la intención del mundo, repitieron los seguidores vallecanos que disfrutaron de un momento único en la grada del Santiago Bernabéu.
Estos cánticos, acompañados de los ya más habituales "Vallecanos, yonquins y gitanos", también repetidos con ironía al máximo nivel desde hace años, representan a una afición del Rayo que fue la gran protagonista del duelo del Bernabéu.