Pablo Hernández, ex jugador del Rayo Vallecano en la temporada 2015/2016, ha colgado las botas. A sus 37 años, el futbolista se despedía del fútbol en activo con un último partido jugado en el estadio de Castalia frente al Cornellá. Nacido en Castellón pudo despedirse ante su público y la afición que le vió crecer en la cantera antes de marcharse al Valencia donde despuntó y se convertiría en internacional.
A Vallecas llegó procedente del Swansea en el que compartió vestuario con otro ex de la franja, Michu. Su ilusionante fichaje se produjo en la temporada en la que el Rayo Vallecano descendería tras el Anoetazo, uno de los encuentros que nos condenó a la segunda división.
Durante su breve paso como franjirrojo disputó 30 partidos y consiguió anotar 3 goles en primera división que no sirvieron para que el Rayo mantuviese la categoría. Tras salir de Vallecas recaló en el Leeds donde consiguió el ascenso a la Premier League y dejó huella.
Pablo Hernández, jugador del Castellón, ha recibido una auténtica ovación por parte de los muchos aficionados ingleses que han ido hoy a Castalia a presenciar el Castellón - Cornellà.
— Rubén Martínez (@rubeenmtnez) May 28, 2022
Momento muy bonito y emotivo. pic.twitter.com/OYnxmX2lXP
Tanto es así que ayer, en su despedida, unos 200 aficionados ingleses del equipo albinegro le despidieron en Castalia.