El Rayo Vallecano afrontará el choque contra el Granada del próximo viernes pendiente de su 'talón de Aquiles' durante las últimas temporadas. La posición de central, que parece seguir arrastrando el mal fario de los años precedentes, volverá a ser protagonista una semana más.

Jémez no parece haber encontrado de manera definitiva la pareja de centrales que le termine de enamorar. Parecía que Abdoulaye y, sobre todo, Zé Castro eran los elegidos, pero los errores del senegalés le hicieron recapacitar buscando la alternativa en un Morcillo que no ha terminado de cuajar. El ex del Recreativo de Huelva tuvo su oportunidad en Villarreal y no la aprovechó y gozó de una segunda ante el F.C. Barcelona, pero tampoco se hizo con ese lugar que ofrezca la seguridad que busca el técnico franjirrojo.

A este cúmulo de acontecimientos, a los que también se sumó el lateral-central Tito de manera circunstancial en el Madrigal, el cuadro vallecano ha tenido que sumar la desgracia de no poder contar ni un solo minuto con Antonio Amaya. El canterano del Rayo no realizó la pretemporada con el resto de compañeros, aquejado de problemas físicos, y, cuando parecía que podría incorporarse al grupo, tuvo que volver a quedarse fuera de los planes de Jémez. Ahora, tras superar esas dolencias, se ha integrado y podría empezar a tener oportunidades, sobre todo porque el equipo lo necesita.

A la expulsión de Morcillo en el encuentro ante el F.C. Barcelona, el Rayo suma el ver cómo el hasta ahora indiscutible Zé Castro no termina de recuperarse de los problemas físicos que le dejaron fuera del choque ante los catalanes. El portugués poco a poco empieza a arrancar, pero no llegará al encuentro de Los Cármenes con garantías y forzar sería tremendamente peligroso. Así las cosas, el técnico franjirrojo volverá a contar con Abdoulaye, que podría formar pareja con Antonio Amaya, siempre que el técnico considere que las circunstancias lo requieren y su progresión es suficiente como para aguantar los noventa minutos ante el cuadro nazarí.

La segunda alternativa pasaría por utilizar al 'comodín' Tito, del que Jémez ya dijo en alguna rueda de prensa que es un tipo de central que le gusta, por su lucha y su velocidad. Esta opción, poco probable, siempre es una alternativa que el entrenador franjirrojo tiene en mente, sobre todo en esos momentos en los que es necesario jugar con tres defensas y el del centro debe ser un hombre con movilidad y velocidad.