Mucho trabajo, humildad y estar a disposición del técnico para lo que necesite. Esas son las líneas maestras marcadas por Licá, última incorporación del Rayo que llega procedente del Oporto para apuntalar la zona ofensiva del conjunto de Paco Jémez. El luso afirmó en la rueda de prensa que sirvió como acto de presentación que "el objetivo es conseguir que el Rayo logre la permanencia y trabajaremos duro a diario para ayudar al Rayo a lograr sus objetivos", añadiendo que su salida del Oporto y su llegada al Rayo "no es un paso atrás, es intentar avanzar en mi carrera, en una liga muy grande como es la española e intentaré aprovechar al máximo esta oportunidad para ayudar al Rayo".

Su apuesta pasa por el trabajo y su predisposición a lo que le pida el míster vallecano. "Mucho trabajo tanto en las bandas como en punta y todo se logra con trabajo, eso es lo que voy a hacer", comentaba, mientras se definía como un "jugador rápido al que le gusta tocar la pelota. Soy un jugador tranquilo y humilde que intentará dar el máximo en el Rayo Vallecano".

Jémez ya ha hablado con el atacante portugués y Licá le prometió dar el máximo para ayudar al equipo. "Ya he hablado con el entrenador que espera de mí el máximo de cosas que pueda hacer para ayudar al Rayo a conseguir los objetivos y le he dicho que puede contar conmigo para todo".