Con Gálvez y Zé Castro lesionados, Rodri fuera del equipo y Galeano como última opción, pese a su condición de único central disponible en la actual primera plantilla, Paco Jémez decidió inventarse un nuevo defensa central para detener las acometidas de uno de los líderes de la Primera División. El lateral derecho franjirrojo, Tito, fue el elegido para intentar apagar el fuego que se mantiene desde principio de temporada en el centro de la zaga franjirroja, por donde ya han pasado hasta un total de siete jugadores, dos de ellos laterales (Arbilla y Tito) y un centrocampista ofensivo (Saúl).
La aparición de Tito, que tuvos sus más y sus menos con su ex-compañero Diego Costa, no sirvió para cortar la hemorragia de goles en contra, que asciende ya a 51 tantos en lo que va de temporada, pero, al menos, dejó una nueva alternativa para Paco Jémez a la espera de la recuperación definitiva de Zé Castro y Gálvez y la posible llegada de un cuarto central.