El Rayo se llevó una gran alegría al salir victorioso de Balaídos.

Para nosotros era un partido muy importante, sobre todo porque estábamos de 'farolillo rojo' y ahora hay un parón de fin de semana que queríamos tener tranquilo y con buenas sensaciones.

Además, demostrasteis que jugando 'a otra cosa' también sois capaces de ganar.

Ellos apretaron mucho, porque jugaban en casa y tenían ganas de resarcirse puesto que no habían ganado aún como locales. Nosotros a veces tenemos que ser algo más prácticos, siempre teniendo en cuenta que nos gusta tener el balón, pero también hay que saber aprovechar nuestras oportunidades y el sábado sí lo supimos aprovechar.

El equipo realizó un partido muy serio, bien colocado y con muchas ayudas.

Desde la semana pasada, que realizamos una gran segunda parte, se vio que habíamos entrado en una buena dinámica. Todos nos ayudamos y estamos preparados para darlo todo por el compañero, y en Vigo se demostró que eso es así, que el equipo va todo en una dirección y así llegan los resultados.

Y con acierto arriba, que ya se echaba de menos.

Eso es algo muy importante, porque los números decían que llegábamos una barbaridad de veces, pero no terminábamos las jugadas en gol, y contra el Celta tuvimos menos que otros días, pero sí las aprovechamos.

En lo personal, muy satisfecho por haber recuperado un sitio en el primer equipo.

Cuando estás en el banquillo o en la grada y no puedes ayudar a tus compañeros, es una pena verlo desde fuera, y ahora que tengo la oportunidad que me ha vuelto a dar el míster, no tengo más opción que aprovecharla y ganarme la confianza que había perdido.