La historia vuelve a repetirse. El Rayo Vallecano se cruza con su futuro más esperanzador y lo hace en una cita ineludible con el buen gusto futbolístico y con una ciudad repleta de buenos recuerdos y de sensaciones que traen a la memoria el atisbo de una vida mejor, cuando el 'Rayito' se encontraba 'tocado' en lo institucional, pero tremendamente esperanzado en lo social. Hace apenas dos temporadas, el tren del ascenso pasaba por la ciudad gallega y hasta allí se desplazaban la esperanza y la ilusión de miles de aficionados franjirrojos que, con su presencia física o con su aliento en la distancia, ayudaron a los de Sandoval a dar un primer gran paso hacia el objetivo del ascenso. Eran los primeros momentos de un Raúl Martín Presa que se "atrevió" a compartir unos minutos con la hinchada de un equipo que ya no le quiere tener cerca. Por aquel entonces, Celta y Rayo luchaban por un billete a Primera División que terminaría sonriendo al conjunto vallecano, dejando al Celta a su suerte en una agónica eliminatoria de ascenso decidida ante el Granada en la tanda de penaltis. En aquel Celta de Paco Herrera militaban dos jugadores que terminarían recalando en las filas franjirrojas. Michu se convirtió en uno de los héroes del retorno del Rayo a Primera, mientras que Trashorras "decidía" esperar una temporada más para dar un paso al frente y asumir galones en el centro del campo a las órdenes de Jémez, tras una primera y gris temporada con Sandoval.

Mañana (Balaídos, 12 horas) el Rayo se citará con el Celta en la búsqueda de un objetivo disfrutado y saboreado durante varios años en la ciudad pontevedresa y que en Vallecas se anhela, viendo el excelente rendimiento del equipo de Paco Jémez.

Europa parece estar maldita para el Rayo. El año pasado, cada vez que se hablaba de ese objetivo... ¡revés!. Este año, la plantilla ha repasado mentalmente los errores del pasado más reciente, para evitar que el sueño sea demasiado grande y pesado y termine desmoronándose a las primeras de cambio.

De momento, y tras alcanzar los 37 puntos sumados con la gran victoria ante el Atlético de Madrid, el equipo vallecano ha atravesado el 'Tourmalet' del calendario acumulando otros cuatro puntos más, aunque dejándose por el camino catorce. Las visitas al Bernabéu, donde el equipo se marchó con el sabor agridulce de no haber hecho todo lo que sabía para generar más peligro, y al Camp Nou, donde los vallecanos sorprendieron por su fútbol fluido, de ataque y descarado, se saldaron con dos derrotas esperadas y que entraban dentro de la lógica. Menos entendible fue volver a tropezar con la piedra del Valladolid, no saber rematar al Deportivo tras generar infinidad de ocasiones de gol o estar por debajo de su propio nivel ante el Málaga la pasada jornada. La victoria ante el Espanyol, y el mencionado punto de Riazor, sirvieron para celebrar la permanencia por adelantado y para proponer un paso adelante que deberá refrendarse ante el Celta de Vigo.

Para el encuentro de mañana, el técnico franjirrojo no podrá contar con Raúl Tamudo, aunque recuperará a Roberto Trashorras, uno de los tres jugadores que, junto a Dani Giménez y Jordi Figueras, ha militado en el cuadro celtiña. El centrocampista gallego del Rayo afirmaba que el Celta de Abel, en comparación con el de Herrera, 'es más de contraataque, quizá más intenso, saca la línea muy arriba, pero cuando estás abajo es complicado. Están vivos y compiten y luchan cada partido'. Por su parte, el central cedido por el Brujas hasta final de temporada, afirmaba que el Rayo debería aprovechar la 'ansiedad' de un Celta que está atravesando momentos complicados y que, pese al cambio de rumbo en el banquillo, no ha conseguido salir de los puestos de descenso a Segunda División.

Los de Abel Resino contarán con la notable ausencia de Iago Aspas, al que Disciplina Deportiva no ha concedido la cautelar tras su agresión a Marchena en el derbi . La baja del gallego permitirá a Park o Bermejo ocupar la posición más avanzada de un equipo necesitado de puntos y que ve en la llegada del Rayo el primero de sus asaltos de cara a la salvación. Desde el club vigués se lanzó un llamamiento a la afición, en forma de vídeo protagonizado por varios de los integrantes de la primera plantilla, solicitando el apoyo en el tramo final de temporada y los seguidores celtiñas han respondido. Se espera un lleno en las gradas de Balaídos para recibir al Rayo.