El Rayo Vallecano miente. Desde que comenzó la temporada, la afición rayista ha solicitado al club que se encargue de gestionar las entradas visitantes tal y como marcan los protocolos de la Liga. Sin embargo, el Rayo se ha negado sistemáticamente alegando que "el estadio está en obras" y no puede "corresponder a los otros clubes" cuando le pidan entradas visitantes.

El Rayo Vallecano miente. Y el encuentro contra el CD Guijuelo de Copa del Rey lo demuestra. No existe partido de vuelta. No hay necesidad de corresponder al club salmantino. Simplemente hay una continua zancadilla al rayismo para complicarles la vida. La propia Federación de Peñas del Rayo Vallecano ha tenido que canalizar las peticiones de un centenar de rayistas y de coordinarse con la Guardia Civil para que el equipo esté apoyado desde las gradas.

El Rayo Vallecano miente. Y no solo miente sino que haciéndolo pone en riesgo, a sabiendas, a los seguidores rayistas que se desplazan a otros estadios. La Peña Rayista Beodos lo denunció en el último desplazamiento a Valencia: "Muchos Rayistas repartidos por el Estadio, no debería de ocurrir ningún incidente, pero si hubiera habido una gestión de entradas por parte del Club,  estaríamos todos juntos en la zona visitante".

El Rayo Vallecano miente. El quid de la cuestión es que miente incumpliendo los protocolos de la propia Liga y aquí no pasa nada. El clamor desde la Federación de Peñas del Rayo es unánime: "Por la seguridad de todos se debería obligar al Rayo Vallecano a gestionar las entradas visitantes como marcan los protocolos de la La Liga".