C.D. NUMANCIA 2 - RAYO VALLECANO 2

Cuatro victorias en dieciséis partidos. Todas frente a equipos que están peleando por no descender. Este Rayo Vallecano no carbura y frente al Numancia volvió a dejar claro que pese a su potencial solo le llega para empatar. El rey del empate en la categoría suma ya nueve igualadas en las dieciséis jornadas disputadas.

Los franjirrojos volvieron a tirar por la borda una doble ventaja. El equipo parece haber perdido la autoridad para ganar un encuentro que dominó durante muchas fases y cuyos puntos volvió a dejar escapar por culpa de sus fallos defensivos.

Pese al frío en la capital soriana el partido no pudo comenzar más caliente futbolísticamente hablando. En el primer cuarto de hora ambos equipos habían tenido ya clarísimas oportunidades para abrir el marcador en más de una ocasión.

En el primer minuto Ulloa y Embarba estuvieron a punto de abrir la cuenta. Fue un milagro que el partido siguiera 0-0 después de esa doble ocasión. Y milagrosa fue también la mano de Morro a disparo cruzado de Curro cuando Los Pajaritos ya cantaba el 1-0.

El Numancia lo intentaba una y otra vez a la contra favorecido por los corners mal ejecutados del Rayo. Pero iban a ser los franjirrojos los que finalmente movieran el marcador: robo en el centro del campo, magistral pase en profundidad de Pozo a Álvaro García, que asistía en el segundo palo a Ulloa para ponerse en ventaja. Cuando los de Vallecas se veían superiores en el juego y en las ocasiones los sorianos encontraron premio a sus contras. El pase atrás dejaba solo a Calero que, tras el control, colocaba la pelota en la escuadra de Morro.

Vuelta a empezar para los dos equipos que estaban brindando un espectáculo maravilloso. Su oda al fútbol se mantuvo hasta el final de la primera parte. Álvaro llevaba el peligro rayista una y otra vez por su banda, pero tanto el último pase como la finalización siempre eran fallidos. Morro frenaba una contra numantina que acabó con disparo de Kako. Y Joni Montiel y Álvaro García se encontraban con el palo y con un defensor sobre la línea de gol evitando milagrosamente que el Rayo se fuera al descanso ganando.

En la segunda parte ambos conjuntos tomaron más precauciones hasta que la magia de Pozo le regaló el segundo a Ulloa. Jugada individual en la que se va de todos y su rosca al segundo palo la empujaba el 9 rayista. El Rayo recogía los frutos de su dominio y podía empezar a forjar una costosa victoria. El centrocampista estuvo a punto de redondear su noche con un disparo que se fue lamiendo el palo.

Pero dos errores de la zaga rayista iban a meter al Numancia en el partido. Higinio desaprovechó el error de Catena, pero Moha no iba a desperdiciar el de Mario Suárez. Las tablas volvían al luminoso a falta de un cuarto de hora para la conclusión del partido. Pareció como si la lesión de Oscar Valentín y el cambio de Joni Montiel hubieran desactivado a un Rayo que no volvió a pisar con peligro el área soriana.

Si algo de ambición le quedaba al partido la pusieron los locales, que estuvieron rondando el gol cuando el partido ya agonizaba. El cabezazo de Gutiérrez y el disparo de Nacho se marcharon fuera por poco. El 2-2 fue inamovible.

Cuarto partido consecutivo sin ganar de los de Jémez que de sus dieciséis partidos han empatado en nueve ocasiones con solo cuatro victorias y tres derrotas. Números incompatibles con la aspiración al ascenso.