Tras una derrota en Villarreal, la directiva del Rayo Vallecano cesaba a Míchel como entrenador del primer equipo. Muchos ojos se fijaron entonces en Luis Cembranos, entrenador en aquel momento del filial y conocedor del club tras haber sido futbolista durante media década, pero la directiva acabó fichando a Paco Jémez.

Curiosidades del destino, pocos meses después y con algunos protagonistas distintos, se repitió la situación en un CD Leganés que sí le ha abierto la puerta de la primera división al técnico leonés. En nuestro programa semanal quisimos hablar con él para que nos contara cómo es vivir en un banquillo de primera.

"Estoy agradecido por la oportunidad que me ha dado el Leganés desde el primer día porque me han tratado fenomenal. He sentido la cercanía, el trato familiar, todas las facilidades que me han dado desde el primer día que me he sentido como en casa y muy agradecido por entrenar a un filial de un club de primera división. El trabajo que me han visto en estos tres meses y las circunstancias que se han producido con un compañero cesado, pues han posibilitado esto. Con Pellegrino he tenido mucha cercanía y ayuda porque el mismo día en que se marcha me ha dado la información que yo necesitara para aprovecharla. Su entereza e integridad es elogiable porque ha entendido que estas cosas pasan en el banquillo. Valoro las circunstancias y ya sabéis lo que pienso del Rayo Vallecano. Habéis vivido internamente muchas cosas que suceden. No quiero comparar por qué es mejor o peor. Pero me siento en un sitio donde me quieren, donde siento esa cercanía y estoy a gusto y en un sitio donde en la ciudad deportiva del Leganés se puede leer la frase: "Los sueños se cumplen". Y yo he podido cumplir el mío porque las circunstancias han sido así. Disfruto de cada entrenamiento y cada segundo como entrenador de primera división" nos contó Luis Cembranos.

Un buen arranque con victoria para una aventura que nadie sabe cómo va a terminar: "Estoy como entré. Empecé el martes la primera sesión de entrenamiento, me senté en el banquillo el sábado y seguimos entrenando y eso es en lo único en lo que pienso. No hay más horizonte que la próxima jornada y no pienso más allá. Necesitas asimilar estas sesiones y esta carga de 3 partidos en 8 días con dos partidos en casa muy importantes para regular y aportar un par de ideas para sacar los partidos adelante y que los jugadores lo interioricen lo antes posible y que sucedan cosas positivas como el resultado del otro día".

Y el futuro lejano es aún más borroso. ¿Se ve enfrentándose al Rayo o dirigiéndolo? "Algún dia tocará jugar contra el Rayo y entonces veré las sensaciones. Yo estoy muy contento por Bolo porque tenemos una relación muy buena desde hace muchos años. Ambos llegamos cedidos, volvimos a nuestros clubes y volvimos a la vez como jugadores del Rayo Vallecano que hizo lo posible para que volviéramos. Mantuvimos esa relación personal durante muchos años y sé lo que ha sufrido teniendo que salir a entrenar lejos de su familia y de su casa. Y sé lo que ha pasado con las diferentes dinámicas de su equipo a pesar de que después ascendiera. Me alegré mucho porque llegara al fútbol profesional y que siga demostrando lo que es en un club que conozco perfectamente porque es uno de los equipos de mi tierra. Estoy muy contento por él y hemos estado a punto de trabajar juntos y quien sabe si en un futuro cercano lo haremos. Nunca se sabe donde vas a tener la próxima oportunidad o reto incluso en el Rayo aunque en otras circunstancias. Es un club al que le tengo un cariño especial donde tuve la mayor parte de mi carrera profesional y donde pude trabajar un par de años en la cantera formando jugadores y estoy orgulloso del trabajo que hice. Pero ahora mismo vivo el momento, vivo este sueño de tener la oportunidad de trabajar en un club en constante crecimiento y lo estoy aprovechando y disfrutando".

Por su tono de voz y lo que cuenta, no parece que a Luis Cembranos le asuste el salto de tercera a primera: "Al final es cambiar el despacho o el vestuario. Entrenar en tercera o en primera lo haces para mejorar al equipo, donde poder reforzar las cosas que el equipo necesitaba. Lo estaban haciendo bien, compitiendo bien contra equipos de su liga e incluso contra los grandes equipos. Al final los resultados no estaban llegando para lo que hacía el equipo. Lo del sábado nos ayuda en el aspecto anímico para comprobar que hay jugadores y posibilidades de sacar esto adelante".

No te pierdas la entrevista completa en el 3x10 de En clave de Franja en Pasión por el Rayo Radio.