El Rayo Vallecano, Franjirroja de Hostelería, Raúl Martín Presa y la Fundación del Rayo Vallecano estaban convocados esta mañana a un acto de conciliación en el Juzgado de Primera instancia nº 6 de Madrid tras la demanda presentada por la Asociación de Accionistas ADRV para exigir aclaraciones en relación a los más de nueve millones de euros supuestamente desviados desde las cuentas del club a las de la Fundación, así como recabar información sobre los casi treinta y dos millones de euros que la entidad vallecana asegura tener depositados en diferentes juzgados para hacer frente a posibles responsabilidades con las Administraciones Públicas. Además, la intención de la asociación de accionistas era exigir explicaciones relacionadas con los cerca de ochocientos mil euros que el Rayo tiene en efectivo en "caja", con la inversión de cuatro millones de euros en Oklahoma, con la situación de las cuentas de la sección femenina y el destino de las subvenciones, con el estado de Franjirroja de Hostelería y sus cuentas, así como con los meses en los que se afirma que los cargos de la junta directiva estuvieron sin ser renovados (de octubre de 2016 a junio de 2017). También se exige el acta de la junta de accionistas, que todavía no ha sido entregado a los asistentes a la misma, una junta que fue grabada por el club y a la que no pudo asistir ningún medio de comunicación.
Dos minutos antes de la hora prevista (a las 8:58), el club vallecano lanzaba un mensaje a través de sus redes sociales anunciando que no acudiría a su cita en los juzgados. El comunicado expresaba lo siguiente:
"El Rayo Vallecano de Madrid SAD informa que no comparecerá al Acto de Conciliación señalado para hoy 13 de noviembre propuesto por la denominada Asociación de Accionistas ADRV, habida cuenta que no existe posibilidad alguna de que se reconozcan como pretende este ente, una serie de hechos que obran en la solicitud de conciliación, los cuales constituyen hechos rotundamente falsos y cuya única pretensión no es otra que enturbiar la imagen del Rayo Vallecano y desacreditar la labor de su Consejo de Administración.
Todo ello es agravado por el conocimiento previo de la falsedad de algunas de estas manifestaciones vertidas por la persona que inicia esta causa (disponiendo el Rayo Vallecano de las pruebas documentales que acreditan la mala fe de quien realiza alguna de estas afirmaciones, pese a saber que son mentira).
Por tal motivo el Rayo Vallecano así como sus consejeros se reservan las acciones legales, que en derecho les amparan, en orden a salvaguardar su buen nombre e imagen".
A continuación, la Asociación de Accionistas ADRV confirmaba que su próximo paso será presentar una demanda civil que "derivará en un largo y complejo procedimiento judicial".
