Opinión. Si hoy hubiera estado en Marte y a mi vuelta hubiese visto que el Barcelona tan solo ganó al Rayo por 1-0, seguramente hubiera pensado que ¡ole mi Rayo!. Si hoy hubiera estado todo el día dormido y al despertarme hubiera visto cómo miles de culés bajaban de su "montaña" celebrando el liderato, con los claxon a toda pastilla y con caras de gran alegría, pensaría que el Barsa ha ganado la Liga, la Champions o la Copa de la Generalitat. Si hoy no me hubiese dado por ver el partido del lunes entre el todopoderoso equipo azulgrana y el pequeño pero orgulloso de la franja, al menos me hubiese ahorrado el mosqueo. Porque menudo escandalazo.
Entiendo su alegría, porque son líderes, pero ninguno de los que bajaban de su montaña 'mágica' con cara de alegría debía sentirse tan orgulloso de los suyos como yo de los nuestros. Porque el Rayo ha perdido, sí, perdido, o quizá debería decir que le han hecho perder, porque hoy no jugamos en igualdad de condiciones, ni mucho menos. No voy a entrar al detalle de cada acción, pero voy a pasar por encima de algunas de ellas. Penalti a favor del Barcelona, ellos tan contentos porque el VAR hizo su trabajo, ¿no?. Agarrón a Mumin, miramos para otro lado. Gol anulado a De Frutos por fuera de juego de Nteka, que con lo grande que es no fue capaz de teletransportarse a la grada para aplaudir la decisión del árbitro. Más de lo mismo. Agarrón, empujón y todos los "ones" del mundo sobre Ciss, en el VAR debieron irse al cuarto de baño a hacer sus necesidades.
En definitiva, que si pasaron muchas cosas en el Barcelona - Rayo Vallecano de esta noche, ninguna fue a favor del Rayo y todas, absolutamente todas, fueron a favor del líder para regocijo de los que bajaban silbando y cantando desde la montaña.
Yo no sé nada de Negreiras, ni de manos negras. No sé nada de comunicados, ni de fantasmas. No sé nada de fútbol, eso parece evidente. Pero quizá tampoco tú sepas, ni el otro, ni el de más allá... sobre todo si una franja cruza tu corazón, porque esta noche tienes mil y una razones para irte a dormir cabreado o cabreada. No sé nada de Negreiras ni comunicados, pero menudo escandalazo. Los de la montaña pueden dormir más que tranquilos, todo les fue bien esta noche. Los del barrio... orgullosos, conscientes de que no nos dejaron soñar.