Ver a Radamel Falcao golear con el Rayo Vallecano sumando 5 tantos en sus 7 primeros disparos a portería será algo que muchos rayistas no olviden. Pero desde su último tanto, justo antes de lesionarse en el Bernabéu, ya ha pasado un buen tiempo. Algo que nunca es bueno para un delantero y menos para un depredador del área como el Tigre. 

El colombiano suma ya 300 minutos de sequía goleadora repartidos en los últimos 8 partidos que ha disputado entre Liga y Copa del Rey. En esa misma cantidad de partidos y con una cifra similar de minutos al inicio de temporada hizo 5 goles.

Y no sólo es Falcao el que ha bajado su efectividad de cara a la portería. Las cifras en el Rayo Vallecano también son muy preocupantes. En los últimos 4 encuentros de Liga, los franjirrojos solo han sido capaces de perforar en una ocasión la portería visitante (Iván Balliu contra el Betis). 

Osasuna será una prueba de fuego tanto para el delantero como para el equipo que solo han conseguido sumar 1 punto de los últimos 12 en juego. La diferencia con la parte baja de la tabla es todavía amplia, pero los de Iraola necesiten sellar la permanencia cuanto antes para coger confianza de cara a la finalísima semifinal que jugarán el 3 de marzo en Sevilla.