Un acto con la afición del Rayo siempre es un momento especial.

Sobre todo para mí, que llevo toda la vida en el Rayo, es muy especial porque gracias a ellos el equipo femenino forma parte del club.

Y además en un sitio como este, el Estadio de Vallecas, que hace algunos años abristeis para jugar partidos de Champions.

Fue un momento muy especial. Siempre recordaré el momento del Arsenal, que lo abrimos y vinieron ocho mil personas. Lo miras y piensas que por qué no, que quizá la temporada que viene se pueda disfrutar también aquí.

Sería bonito, porque ahora que se pone de moda abrir grandes estadios para el fútbol femenino, quizá también Vallecas se pueda sumar.

Ahora se está impulsando más el fútbol femenino, se están televisando más partidos y se está promocionando muchísimo, a unos niveles espectaculares. Gracias a eso se están abriendo grandes estadios, aún con la duda de si se llenarían o no y abres Mestalla y van 17.000 personas. Eso es un punto a favor del fútbol femenino, que está creciendo muchísimo y esperemos que nosotras también nos podamos subir a ese carro y poder disfrutar también de este estadio.

Temporadón del Rayo, que empezó con muchas dudas pero que ha terminado séptimo y con clasificación para la Copa.

Al principio mucha gente nos daba como equipo de descenso y yo le decía a mi entrenador que estuviéramos tranquilos, porque nos terminaríamos metiendo en copa. Estábamos ahí con las dudas, pero el equipo estaba trabajando muy bien y en las primeras jornadas nos tocaron los equipos que han terminado arriba, que no era nuestra liga. Cuando te viene tu liga, empiezas a demostrar que puedes y consigues el objetivo. Puede que el día de la Real, que nos sancionaron con el partido perdido, fuera un palo muy duro, pero el equipo se repuso muy bien y pudimos meternos en la Copa de la Reina.

A principios de semana pudimos hablar con Miguel A. Quejigo para el podcast de Pasión por el Rayo y le preguntamos por la importancia que habéis tenido tanto Natalia como tú dentro de este equipo y se deshizo en elogios hacia vosotras.

Hemos metido un punto de experiencia, porque tanto Natalia como yo llevamos muchísimos años. Natalia es una jugadora determinante, que te puede decidir un partido y cualquier entrenador la querría en su equipo, por suerte está en el nuestro. Para Miguel es un placer tener jugadoras como Natalia y si lo combinas con jugadoras jóvenes, con ilusión y con ganas, haces un equipo muy competitivo que consigue sus objetivos.

También nos dijo que no estaba muy claro el futuro de la plantilla, ¿cómo está ese tema?

Poco a poco. Esta semana han empezado a hablar con algunas compañeras, pero esto va muy lento. Hasta que los chicos no se salvaran no sabíamos nada y, ahora que se han salvado, esperamos que se produzcan más renovaciones.

¿Y tú cómo estás?

Yo muy bien. Mi principal objetivo es quedarme en el Rayo, que es mi casa. Ahora lo único que me preocupa es lo del domingo que, como les digo a mis compañeras, es un sueño y tenemos que disfrutarlo. Es un premio que nos hemos ganado y ellas son las que tienen más que perder.

Quizá ahí esté la clave, en no tener la presión que tienen ellas por ser campeonas de liga y grandes favoritas.

Lo más importante es que sea a partido único, porque puede pasar cualquier cosa. A doble partido sería más complicado, porque es un equipo muy sólido, que arriba tiene jugadoras muy buenas, pero a un partido influyen muchas cosas y tenemos nuestras opciones. Vamos a ir a ganar, porque no tenemos ninguna presión y ellas quieren hacer el doblete. Iremos a disfrutarlo y si se da el premio, pues bienvenido.

Con el apoyo de la afición, que se desplazará a Matapiñoneras para ayudaros.

Eso es algo muy importante. Nos sorprendió a todas que abrieron el primer autobús y se ha llenado y ya estaban con el segundo. Muchas compañeras se sorprenden porque son nuevas y todavía no saben lo que es el Rayo Vallecano, pero a otras no nos sorprende porque siempre ha sido así y se lo agradecemos.

¿Te ves en Las Rozas?

Claro que te ves, porque si no, no jugaríamos. Sería un broche de oro de muchos años y ojalá se dé.