El protagonismo de la afición del Rayo Vallecano excede los límites de los noventa minutos de cada partido y desde los días previos transmite valores y sentimientos ajenos al fútbol. Ayer tuvimos ocasión de disfrutar una vez más con el hermanamiento de las aficiones del Córdoba y el Rayo que, durante todo el día, compartieron el amor por sus colores por cada rincón de la ciudad. La Peña Cordobamanía acogió a los seguidores vallecanos desplazados a la capital cordobesa y compartió con los franjirrojos una jornada que una vez más volvió a ser ejemplo de respeto y hospitalidad.
Además, durante todo el encuentro, los seguidores vallecanos se convirtieron en los grandes animadores de la noche con su aliento continuo a los jugadores del Rayo Vallecano en una jornada que tendría como momento álgido la gran ovación que todo el Estadio el Arcángel les brindó al desplegar una gran pancarta en la que podía leerse "2017: La lacra continúa, no a la violencia machista".
A la conclusión del encuentro, los jugadores del Rayo se acercaron a la grada ocupada por los rayistas para agradecerles el apoyo brindado. La afición del Rayo volvió a ser un ejemplo.