A nadie se le escapa que Roberto Trashorras era la extensión de Paco Jémez en el terreno de juego. El gallego, al que favorecía sobremanera la forma de jugar del Rayo en la etapa anterior, fue el máximo defensor de una idea que, en muchos momentos, fue criticada por buena parte de la afición, pero que a la postre daría más alegrías que tristezas. Frases como "no podemos renunciar a nuestro estilo" o "jugando así vamos a sacar esto adelante", fueron algunos de los argumentos esgrimidos por el capitán franjirrojo para mantener su postura respecto a la idea de sacar el balón desde la defensa. Trashorras siempre ha jugado igual, bajar a la zona de centrales a recoger el balón y, a partir de ahí, variar entre la conducción, el apoyo con los centrales para volcar al lado contrario o el cambio de orientación directo para buscar superioridad por un costado. Ese es Roberto Trashorras.
Muchas cosas han cambiado con la llegada de Sandoval. Más allá de los 'problemas' que pueda haber dentro del vestuario (supuestamente solucionados), el cambio de estilo afecta a varios jugadores, pero sobre todo a Trashorras. El jugador franjirrojo ha alternado su posición habitual con la de mediapunta, en busca de una ubicación que el técnico no termina de ver clara. Además, pese a la titularidad indiscutible hasta el momento de Trashorras, los compañeros han ido cambiando, teniendo que jugar en diferentes partidos junto a Fran Beltrán, Clavería, Zuculini o Cristaldo, cuando lo ha hecho en el doble pivote.
Ser el 'cerebro' del equipo y portar el brazalete de capitán añaden una pequeña dosis de responsabilidad extra a todas las acciones y partidos disputados por Trashorras, hasta el punto de ser señalado como 'responsable' de las cosas que no funcionaron bien el pasado fin de semana ante el Numancia. Tras la sustitución de Trashorras y la entrada de Cristaldo, Sandoval no dejó lugar a dudas en la rueda de prensa posterior al choque. Preguntado por la sustitución, el técnico comentaba que "no estábamos jugando donde teníamos que estar y hemos sacado a un jugador donde teníamos que jugar, arriba y no abajo", añadiendo términos como "cabezonería de intentar buscar por banda a Rat" o "era un partido para hacer cambios de orientación y dividir y tener unos contra uno con Lass por banda", añadiendo que "no lo hemos entendido y eso nos ha llevado a tener el partido en 1-3" y "los cambios nos han dado mucho, porque hemos tenido el balón más en campo contrario que en nuestro propio campo".
Trashorras no pasa por su mejor momento. Desubicado en el campo y con la presión añadida de parte de la grada (hubo quién le reclamó cuando varios jugadores salieron a saludar a Bukaneros después del partido ante los sorianos), el capitán franjirrojo está ante la 'prueba de fuego' de su futuro rol en el equipo. El sábado, ante el Girona, primer capítulo.
